lunes, 6 de abril de 2009

AMÉRICA NO ES EU...

América no es Estados Unidos, o
…un poco de geografía, historia y lingüística
Susana Arroyo-Furphy
Si partimos de las premisas: “América del norte o Norteamérica está formada por tres países: Estados Unidos Mexicanos, Estados Unidos de América y Canadá, así como por tres dependencias: Groenlandia (Dinamarca), Bermudas (Territorio de Ultramar) y Saint-Pierre-et-Miquelon (Francia)”; y “si los Estados Unidos Mexicanos, los Estados Unidos de América y Canadá son países que integran el norte del continente americano”, por lo tanto “los mexicanos, los estadounidenses y los canadienses (además de los habitantes de las dependencias mencionadas), son norteamericanos”.
Quiero decir con esto que:
 Norteamérica no es los Estados Unidos Mexicanos.
 Norteamérica no es Canadá.
 Norteamérica no es los Estados Unidos de América. (Le pido al lector amablemente que repita dos o tres veces este último axioma. Muchas gracias).

Así es. Ha quedado entonces demostrado de manera empírica que los Estados Unidos de Norteamérica, país conocido también como Estados Unidos, E.E. U.U. o U.S.A. (por sus iniciales en inglés, esto es: United States of America), no constituye la totalidad de la zona septentrional -es decir, el norte- del continente americano. Por lo tanto, es enteramente absurdo, ilógico, ridículo, estigmatizante, denigrante, aberrante, racista, estereotipado, se-paratista, segregacionista, insensato, disparatado, incoherente, irracional, necio, inadmi-sible, incongruente, narcisista, descabellado y tonto llamar a un país, en este caso Estados Unidos, como representante de la totalidad de los países del hemisferio norte del continen-te americano. Pero no solo eso.
Es tal la magnitud de semejante ignorancia, incultura, majadería, tontería con la que dicho país se hace llamar representante, portador, baluarte, parangón, único, absoluto, bastión, de todo el continente, que los países de Centroamérica: Guatemala, Belice, Costa Rica, El Salvador, Panamá, Honduras y Nicaragua, que se encuentran en América central, así como: Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, pertenecientes al hemisferio sur de América, América del sur o Sudamérica, forman parte consecuentemente del país que se hace llamar América. Todos estos países están en América.
Así que cuando la gente en la calle, en las reuniones, los noticieros, la prensa, la radio, en libros, revistas, sitios de internet, etc., etc., se refieren a América cuando quieren realmente referirse a Estados Unidos, están cometiendo un craso, inadmisible, inexcusable, garrafal error.
¿Y qué decir de las Antillas? Las Grandes Antillas, constituidas por Cuba, Jamaica, República Dominicana, Haití y Puerto Rico; y las Pequeñas Antillas, que se extienden desde Puerto Rico a la costa noreste de América del Sur y comprenden las islas Vírgenes, las islas de Barlovento (entre las que se incluyen Grenada, Martinica, Barbados y Trinidad y Tobago) y las islas de Sotavento, grupo insular al que pertenecen las Antillas Neerlandesas (Aruba, Curaçao, Bonaire), y las doce islas y archipiélagos venezolanos incluidos en las Dependencias Federales, todos ellos son aludidos cuando alguien se refiera a América. Cualquiera de nosotros, ustedes, dominicanos, haitianos, mexicanos, uruguayos, chilenos, argentinos, canadienses, groenlandeses, panameños, colombianos… debemos pensar que somos parte integrante del llamado “americano”. NO a los estadounidenses solamente.
Este documento es una exhortación a todos los americanos que nacimos en cualquier país de América, a todos los que viven en el continente americano o que aunque hayan o hayamos salido de nuestros países, seguimos y seguiremos siendo americanos.
Me gustaría dar inicio a una encuesta y que la voz de los hispanohablantes, portugueses y de otras lenguas que no sea inglés, de los cientos de millones nacidos en el continente americano, pudieran expresar el agrado o desagrado de negársele la posibilidad de ser llamado americano o americana, porque ese gentilicio es privativo de los nacidos en un país que no tenía nombre propio y que se llama Estados Unidos.
El español es el idioma con mayor número de hablantes en el continente americano. Es hablado por más de 360 millones de personas. El inglés es el segundo idioma con 325 millones; además, 187 millones de personas hablan portugués. Hay muchas otras lenguas que se hablan en América: guaraní, quechua, náhuatl, lenguas mayenses, francés, criollo, neerlandés, papiamento, italiano, alemás y muchas más. Es decir, de los 800 millones de habitantes en el continente americano, un 40% son anglosajones.
Muchos están equivocados. Inclusive la RAE en su 23a. edición (que usted puede encontrar en internet: www.rae.es), tiene como entrada para 'americano' la definición de 'estadounidense', es decir que maneja el término como sinónimo. ¡Vaya aberración!
Sin embargo, en la 20a. edición, de 1992 la RAE (usted la puede encontrar en la sección de “Diccionarios Académicos” en ese mismo enlace), señalaba: americano, na. ad. Natural de América. Ú. t. c. s. 2. Perteneciente a esta parte del mundo. 3. En regiones de activa emigra-ción, indiano, que vuelve rico de América. 4. V. calendario americano.
Es decir, no es sino hasta la última versión que la Real Academia de la Lengua Española ha decidido que un americano es forzosamente estadounidense. ¡Qué horror!
Antes de finalizar este pequeño documento, ruego a los lectores y a sus amigos, familiares y conocidos, que no llamen 'Méjico' a México.
Bastante trabajo nos ha costado liberarnos del yugo esclavizante de los poderosos para tener una digna independencia. México es el nombre de mi país. Así, escrito con “x”. 'Méjico' no puede ser la evolución correcta de la “x”. No proviene del latín: 'truxo' > 'trajo'.
El idioma que hablaban los aztecas no proviene del latín, es imposible, proviene de un tronco distinto, de las llamadas lenguas amerindias. Tiene sus propias raíces.
La “x” se encuentra en la rica toponimia mexicana: Xochimilco, Tlaxcala, Texcoco, Atlixco, Taxco, Huixquilucan y miles de nombres más; no nos desharemos de la “x”, no lo haremos nunca, no cuando aún cuando se encuentra en los nombres de la abundante comida mexicana: en ‘nixtamal’, del náhuatl nextli (que es el proceso para elaborar las tortillas), xocoatl, que es ahora, 'chocolate'; en los dioses: Mixcóatl, el dios mexica de las tempestades y de la caza; el nombre en náhuatl significa 'Serpiente nube' (mix- 'nube' + cōā-tl 'serpiente'); Coyolxauqui, la diosa desmembrada; y tantos otros.
En España, hasta el siglo XVI (siglo en que los españoles llegaron a lo que hoy es México), la letra escrita x (en palabras como dexar, dixo) se pronunciaba como la ch francesa o la sh inglesa; la transición hasta la pronunciación actual (j española) llevó todo ese siglo (un poco después, también cambió la grafía por j: dejar, dijo). Cuando los españoles oyeron en lenguas indígenas el sonido /sh/, lo escribieron x. Hoy, en las palabras de origen indígena que por tradición se escriben todavía con x, ésta tiene una de tres pronunciaciones, según el caso; ejemplos: México, Oaxaca /j/; Xochimilco, Xóchitl /s/; xocoyote, xola /sh/.
Y, bien, luego de este breviario lingüístico, me uno al mundo democrático para dar la bienvenida al presidente de los Estados Unidos de América, el Sr. Barack Obama, a quien le pido desde aquí, personal y humildemente, que haga lo posible porque la gente no se confunda y que deje de llamar América a un solo país.
Desde estas lejanas tierras australianas, este artículo está firmado por una mexicana-americana; puesto que México es parte de América, y lo digo así como los franceses, o los alemanes, o los españoles, o los italianos, se dicen europeos; y quien además ahora es aus-traliana. Tras seis años de vivir en este hermoso país, he recibido la ciudadanía australiana el pasado 26 de enero, día de Australia, por lo tanto ahora soy mexicana-americana-australiana.

Publicado en Revista Hontanar:http://www.cervantespublishing.com/Hontanar/2009/Hontanar_marzo_2009.pdf

4 comentarios:

gustavo dijo...

Tu artículo me parece divertido e interesante. Alguna vez hemos escrito a cerca de lo mismo. Yo como Argentino tambien reclamo, como todos los hermanos del continente, llamarme Americano, por la simple razón de serlo. De la RAE se puede esperar cualquier cosa pues está incorporando cualquier termino, quizás las academias de cada uno de nuestros países deberían ocuparse de eso. Chua Mexicana-Americana- Australiana
Un Abrazo Gustavo

Enrique Gracia Trinidad (EGT) dijo...

Magnífica exposición. Enhorabuena.
A ver si dejamos de decir tonterías cuando hablamos de América.
Enrique Gracia Trinidad

Yo Escribo dijo...

Querido Enrique,
Como siempre es maravilloso leerte. Gracias por tus palabras.
Espero con ansiedad participar de nuevo en tu extraordinario Curso de Poesía en El Escorial!
Hasta siempre,
Susana

Yo Escribo dijo...

Hola Gustavo,
Las Academias de nuestros países por lo visto están ocupadas en otros quehaceres. Mira que no importarle a "mi" Academia Mexicana que en el RAE aparezca "mejicano"... eso es el colmo!
Saludos afectuosos,
Susana